La empresa de alquiler de viviendas Airbnb planea presentar su solicitud durante este mes de agosto para salir a bolsa a finales de este año. A pesar del impacto del coronavirus en el sector turístico, la empresa continúa con los planes anunciados el año pasado.
Airbnb, con sede en San Francisco, está valorada actualmente en 18,000 millones de dólares. Aunque el Covid-19 le ha pasado factura: su valor estimado hace un año era de $31,000 millones.
El pasado 8 de julio Airbnb registró un de 1 millón de noches facturadas, la cifra más importante alcanzada después de la crisis por el Covid-19. Desde abril, la compañía ha notado una recuperación en sus reservas, aunque lenta y todavía lejos de los niveles de principios de 2020.
Aunque la empresa todavía no ha confirmado oficialmente una fecha para salir a bolsa, según fuentes cercanas a The Wall Street Journal, Morgan Stanley y Goldman Sachs están preparando la IPO.
Airbnb se uniría a otras empresas que ya han logrado salir a mercado en medio de la pandemia, como Warner Music o Lemonade.
La salida a bolsa de Airbnb es esperada por muchos analistas y el público general, que ven cómo la economía colaborativa ha ayudado a otras compañías como Uber o Lyft.
Airbnb en bolsa: Reinventarse para sobrevivir
El fundador de Airbnb, Brian Chesky, tenía en sus manos una de las mayores empresas de alquiler de viviendas compartidas, que en 2019 estaba valorada en 31,000 millones de dólares, convirtiéndose en una de las startups más exitosas a nivel mundial.
La pandemia provocada por el coronavirus congeló el turismo y las finanzas de Airbnb saltaron por los aires. Esto acarreó una ola de despidos y reajustes internos, aunque la empresa tiene puestos los ojos en el futuro.
El objetivo de Brian Chesky era presentar los correspondientes documentos a la SEC en abril para solicitar su salida a bolsa. El Covid-19 borró sus planes de la noche a la mañana. O quizá sólo los aplazó cuatro meses. Parece que la compañía ha sabido reinventarse para sobrevivir. Wall Street espera con ansia la IPO de Airbnb, la cual, a pesar del descalabro económico sufrido durante la pandemia, sigue adelante con sus planes.