Alternativas smart beta a los fondos y ETFs más populares

Estrategias smart beta

Invertir en fondos o ETFs indexados es una de las estrategias más comunes para tener una cartera con exposición a cientos o miles de acciones. Sin embargo, muchos de estos fondos (como los que siguen al S&P 500 o los que siguen a los sectores de este índice) no están tan diversificados como podríamos creer, ya que los índices que representan están ponderados por capitalización bursátil. A continuación, te presentamos algunas estrategias alternativas, conocidas en su conjunto como smart beta, que utilizan cada vez más muchos fondos mutuos y ETFs.

Alternativas smart beta a los fondos y ETFs ponderados por capitalización bursátil

El comportamiento de índices ponderados por capitalización bursátil puede depender de cómo evolucionen unas pocas empresas, si la diferencia de tamaño entre los componentes del índice es significativa.

Por ejemplo, en estos momentos, las 5 empresas más grandes del S&P 500 representan más del 20% del valor del índice. Esta sobreexposición a un puñado de gigantes ha ayudado a popularizar estrategias alternativas de fondos mutuos y ETFs.

Estrategias smart beta, alternativas a fondos y ETFs ponderados por capitalización bursátil

Una metodología alternativa consiste en incluir todas las acciones de un índice en cantidades iguales. En este caso, cuando unas compañías aumentan su valor, una parte de sus acciones se vende y el dinero recaudado se reinvierte en aquellas que se han comportado peor. De esta manera, el peso de cada acción dentro del índice siempre es el mismo.

Otras alternativas se centran en ponderar aquellas empresas con mayores dividendos, acciones con menor volatilidad o con mejores fundamentales.

Este tipo de estrategias, conocidas como smart beta, recrean los índices más conocidos con distintas ponderaciones, y son uno de los tipos de ETFs con mayor crecimiento en los últimos años.

ETFs y fondos smart beta

A continuación te presentamos seis estrategias alternativas a los fondos y ETFs ponderados por capitalización bursátil.

Growth

Estos fondos buscan mejorar la rentabilidad dando más peso a empresas con mayor crecimiento, conocidas en la industria como growth. Asignan una puntuación a cada acción dependiendo de las métricas de crecimiento y rebalancean el fondo en base a ellas.

Esta estrategia puede ser apropiada para inversores que quieren un retorno potencial superior al de los índices tradicionales ponderados por capitalización bursátil. Aunque también deben ser capaces de soportar un mayor riesgo.

Es una buena apuesta si las empresas con mayor crecimiento en la actualidad continúan siéndolo en un futuro.

Value

Los fondos smart beta value evalúan el descuento en el precio que tiene una empresa respecto a sus datos fundamentales, como pueden ser los ingresos, beneficios o ratio P/E. Cuanto mayor es la diferencia entre el precio actual y el estimado por sus fundamentales, más peso tendrá la empresa en el índice.

Es una buena apuesta para quienes desean rentabilidades más seguras y evitar acciones de alta volatilidad como las growth.

Dividendos

El fondo da mayor peso a aquellas acciones que pagan mayores dividendos. El peso de cada una de ellas puede venir dado por la rentabilidad del dividendo o por la cantidad de dólares que éste genera.

Es una estrategia apropiada para quienes se acercan a su jubilación y prefieren tener una inversión que genere ingresos.

Es una buena apuesta para quienes quieren maximizar su rentabilidad gracias a la reinversión de los dividendos.

Momentum

Estos fondos tratan de capitalizar en aquellas empresas que tienen una tendencia alcista importante. Darán más peso a acciones con fuertes movimientos y menos a aquellas con debilidad o bajistas.

Es una buena apuesta para quienes quieren maximizar su rentabilidad a corto plazo, ya que la tendencia puede cambiar de dirección rápidamente.

Baja Volatilidad

Esta categoría de fondos favorece aquellas acciones que históricamente han tenido fluctuaciones más bajas de su precio, comparadas con la media del mercado.

Es una estrategia que no entraña demasiado riesgo, aunque supone sacrificar importantes rentabilidades potenciales.

Es una buena apuesta para aquellos inversores más conservadores o que están cerca de llegar a la edad de jubilación.

Calidad

Estos fondos prefieren compañías que históricamente han mostrado mayores rentabilidades, baja deuda e ingresos sólidos y constantes.

Es una buena apuesta para quienes aprecian las empresas perennes y de calidad, evitando los mayores riesgos (y beneficios potenciales) de otro tipo de empresas.

Incorporar alternativas smart beta en una cartera de fondos o ETFs ponderados por capitalización bursátil puede ser una buena opción. Además, dada la variedad de este tipo de estrategias, siempre puede encontrar alguna a su gusto.

 

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