La burbuja puntocom y la agónica recuperación del Nasdaq

La burbuja puntocom y el Nasdaq

Este año se cumplen 20 años del pinchazo de la burbuja puntocom, asociada al índice tecnológico Nasdaq. Actualmente, el sector del mercado con mayor peso en el índice S&P 500 y en la economía estadounidense vuelve a ser el tecnológico, aunque las cosas han cambiado.

Tras la recuperación más lenta de un mercado bajista de toda la historia de los Estados Unidos, hace unas semanas, el Nasdaq superó los 10,000 puntos.

Pinchazo y posterior recuperación de la burbuja puntocom

El 10 de marzo de 2000, el Nasdaq Composite tocó máximos de la burbuja puntocom, alcanzando intradía los 5132.52 puntos. Durante los dos siguientes años, el índice caería sin frenos, hasta hacer suelo en 1108.49 puntos en octubre de 2002, tras perder el 78.4% de su valor.

Impacto de la burbuja puntocom en el Nasdaq Composite

Pero eso fue sólo parte de la agonía. El resto sería la recuperación anémica del índice desde esos mínimos. Hasta noviembre de 2014 el Nasdaq no volvería a ver sus niveles de marzo de 2000, incluso teniendo en cuenta los dividendos.

Si ajustamos por inflación, el índice no se recuperó hasta agosto de 2017, tras más de 17 años.

¿Cuán dramático fue el pinchazo de la burbuja puntocom para el Nasdaq?

Imaginemos que el índice Dow Jones sufriese a partir de hoy una caída igual de aguda y una recuperación igual de lenta.

El Dow estaría en 5,400 puntos en octubre de 2022 y no alcanzaría sus niveles actuales hasta noviembre de 2034.

El escenario sería devastador para personas jubiladas y aquellas cercanas a la jubilación que confían en sus inversiones para poder vivir durante los próximos años.

¿Es posible vivir otra situación similar en el mercado estadounidense?

A primera vista podría parecer que una recuperación tan lenta tiene precedentes. Por ejemplo, tras el crack de 1929, el Dow Jones no recuperó su nivel anterior hasta 1954.

Sin embargo, la recuperación real de la mayoría de empresas del tomó bastante menos que esos 25 años, principalmente por tres razones:

  • Las 30 acciones que componían el Dow Jones se comportaron peor que la media.
  • Los dividendos, que eran sustanciales en los años 30, ayudaron a recuperar pérdidas.
  • La inflación a comienzos de los años 30 era negativa.

Por tanto, ajustado por dividendos e inflación, el Dow Jones se recuperó en marzo de 1937, sólo siete años y medio más tarde.

En la historia más reciente, ajustando del mismo modo por dividendos e inflación, al Dow Jones le costó también siete años y medio recuperarse de su caída relacionada con la burbuja puntocom y poco más de cinco años recuperarse de la crisis financiera de 2008-2009.

La recuperación más larga de la historia para el Dow fue a partir del bear market de 1973-1974. Ajustando por dividendos e inflación, el Dow Jones tardaría 12 años en volver a sus máximos de 1973.

Si hablamos de promedios, tomando los bear markets desde mitad de los años 20, el mercado tarda en recuperarse poco más de 3 años, ajustando por dividendos e inflación.

Por tanto, los 17 años de recuperación del Nasdaq tras la burbuja puntocom fue realmente un outlier. Ningún otro mercado bajista en la historia estadounidense ha tenido una recuperación tan larga.

El problema de no diversificar

En marzo de 2000, Cisco Systems (CSCO), la empresa de hardware y software para dispositivos de Internet, era la compañía con mayor capitalización bursátil de todo el mundo. Y, por tanto, también era la de mayor peso en el índice Nasdaq. Durante los dos años siguientes, Cisco perdió más de un 90% de su valor.

En la actualidad, las cinco principales compañías del S&P 500 representan más del 20% del índice. Esto significa que el S&P es más vulnerable a una caída potencial de ese puñado de empresas.

Aun así, el S&P 500 se encuentra ahora más diversificado que el Nasdaq durante la burbuja puntocom, cuando las 5 mayores empresas del índice sumaban más del 40% de su valor.

Algunas de las opciones para evitar la sobreexposición al sector tecnológico pueden ser tener parte de nuestra cartera en otros sectores del S&P 500 o considerar estrategias smart beta para mejorar la diversificación de nuestras inversiones.

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