Vender en corto: El arte de apostar contra el mercado

Vender en corto: El arte de apostar contra el mercado

La manera más habitual para cualquier inversor de beneficiarse del mercado es comprar acciones cuyo valor se incrementa a lo largo del tiempo. Sin embargo, es común entre muchos profesionales de la bolsa el sacar provecho de las caídas del mercado, una estrategia conocida como vender en corto.

Hay quienes creen que los short sellers, traders que se dedican a apostar contra ciertas empresas, tienen un efecto negativo sobre ellas. Otros, consideran que las ventas en corto son necesarias para evitar la sobrevaloración del mercado e incluso para sacar a la luz fraudes contables.

¿Qué significa vender en corto?

Vender en corto, también conocido como «entrar en corto» o «abrir cortos», consiste en pedir prestado un activo (por ejemplo, acciones) y venderlo en el mercado, para posteriormente comprarlo a un precio más bajo. Tras recoger la diferencia entre la compra y la venta y repagar el préstamo, la cantidad restante es el beneficio obtenido con la operación.

Imaginemos que una acción se encuentra a $100, pero creemos que va a sufrir una caída: venderíamos en corto a $100. Supongamos que, al cabo de dos semanas, el precio de la acción ha caído a la mitad. En este momento cerraríamos la posición recomprando a $50. La operación tendría unas ganancias del 100%, ya que «hemos comprado» a $50 y «vendido» a $100.

Este tipo de estrategias son normalmente más utilizadas por day/swing traders que por inversores a medio/largo plazo.

¿Cómo entrar en corto en una acción?

Para entrar en corto en una acción, en primer lugar, necesitas pedir prestadas unas acciones que no posees para recomprarlas más tarde. Este proceso lo hace automáticamente tu bróker, aunque necesitas tener con él una cuenta con margen o apalancamiento. No todos los brokers permiten abrir posiciones cortas. Ni en cualquier acción.

Dado que realmente estás pidiendo un préstamo, tendrás que pagar intereses sobre él hasta que las acciones sean recompradas. Habitualmente, el tipo de interés que se paga es muy bajo y puede ser desgravable.

La operación en corto se abre y cierra de manera similar como se ejecutaría una operación en largo. Simplemente, la razón de entrada es distinta: aquí creemos que el precio de la acción va caer.

Como en cualquier operación bursátil, es importante tener un plan antes de abrir posiciones. Deberías identificar un punto de entrada y un punto de salida. Además, es muy recomendable el activar un stop loss, el cual, en una venta en corto, se encontrará a un precio superior al de entrada. Ten en cuenta que el establecer un stop loss no garantiza que la orden de salida de la posición se ejecute a ese precio. Un gap alcista por encima de ese punto podría acarrearnos unas pérdidas mucho mayores de las planeadas con el stop loss.

Riesgos de vender en corto

Existen muchos riesgos al vender en corto, más que en una operación en largo.

Los riesgos de vender en corto son mayores que los de comprar en largo

Pérdida potencial infinita

En una compra común de acciones, el máximo capital que puedes perder es el 100% de tu posición. Es decir, la acción pasa a valer $0 y se esfuma todo el dinero que habías invertido en esa empresa.

Sin embargo, el precio de una acción puede seguir subiendo, potencialmente, de manera indefinida. Por tanto, teóricamente no hay límite a la cantidad que deberías pagar para poder recomprar las acciones que vendiste.

Margin calls

Si la operación va en tu contra, es decir, el precio de la acción sube, el valor del colateral que mantienes en la cuenta de inversión puede caer por debajo del mínimo requerido. En ese caso, puedes recibir una margin call, donde tu bróker puede pedirte que deposites inmediatamente más capital u otros activos para cubrir la pérdida que estás sufriendo.

Si no puedes hacer frente y restablecer la cantidad necesaria de colateral, tu bróker puede cerrar tu posición sin más aviso. Es importante resaltar que la operación de salida será una orden a mercado y que, en caso de que se produzca tras un movimiento alcista fuerte o el spread sea muy alto, puede suponer pérdidas muy significativas para tu cartera.

En cualquier caso, las ventas en corto no deberían ser utilizadas por inversores principiantes. Sin embargo, si tienes plena convicción (algo peligroso en el mundo de la inversión) de que una acción o un índice va a perder valor y conoces los riesgos, adelante.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *